Comienza Gobierno de EU paro de Labores
Estados Unidos, Octubre 01 (2013).- Son 800 mil funcionarios del gobierno federal estadounidense y más de un millón de otros trabajadores dejarán de percibir a partir de hoy ingresos y de acceder a varios servicios públicos debido a que demócratas y republicanos no lograron, la noche de ayer, un acuerdo de un nuevo presupuesto y evitar así el “cierre” inminente del gobierno federal, el primero en 17 años.
El Senado rechazó un proyecto de ley de la Cámara de Representantes que podría haber evitado un cierre parcial del gobierno pero a la vez habría retrasado la reforma sanitaria Obamacare del presidente Barack Obama, lo cual no es aceptable para el presidente ni para los demócratas. La Cámara alta descartó la propuesta por 54 votos frente a 46, horas antes de que el gobierno se quede sin dinero para operar si el Senado y la Cámara de Representantes no se ponen de acuerdo en una ley de presupuesto en un corto plazo.
La votación fue la segunda de ayer sobre el asunto en el Senado y supone el fracaso del tercer intento de los republicanos de la Cámara baja de socavar la reforma sanitaria aprobada en 2010 aprovechando el debate sobre el presupuesto. En esta ocasión, el plan consistió en retrasar durante un año la entrada en vigor de la parte más importante de la reforma, la que a partir de enero obligará a todos los estadunidenses a contratar un seguro de salud.
Además, la propuesta prohíbe al gobierno subvencionar los seguros médicos de los miembros del Congreso o los funcionarios de la Casa Blanca, incluido el presidente del país, Barack Obama. El presidente telefoneó la tarde de ayer a los líderes republicanos en ambas cámaras y les advirtió que un presupuesto que amenace la reforma de salud “nunca se aprobará en el Senado ni se convertirá en ley”, según la Casa Blanca.
La Cámara de Representantes debe decidir si acepta o no la propuesta “limpia” en la que insiste el Senado, es decir, un presupuesto que permita seguir financiando el gobierno y no incluya ataques contra la reforma sanitaria. El presidente de la Cámara baja, el republicano John Boehner, dejó claro que no está dispuesto a ceder.
“No voy a negociar”, dijo Boehner. “Le diré al presidente: esto no se trata de mí. No se trata de los republicanos en el Congreso. Se trata de justicia para los estadunidenses”, agregó, y subrayó el “impacto devastador” que está teniendo la reforma sanitaria.
El ala conservadora del partido republicano ve el debate sobre el cierre del gobierno como su mejor oportunidad para descarrilar la reforma sanitaria, que se encuentra en una etapa crucial con la entrada en vigor hoy de la oferta de seguros médicos para todos los estadunidenses.
Un cierre del gobierno obligará a mandar a casa a casi 800 mil funcionarios durante el tiempo que dure la escasez de fondos y podría costar más de mil millones de dólares a las arcas públicas, según la Casa Blanca. En tanto, Obama, firmó ayer una ley que permitirá que todos los militares sigan recibiendo sus salarios durante el cierre del gobierno, mientras la Cámara baja iniciaba una nueva estrategia de negociación con el Senado para aprobar el presupuesto.
Obama firmó la ley sobre los militares, aprobada unánimemente el domingo por la Cámara de Representantes y respaldada de la misma forma hoy por el Senado. La medida asegura el pago a los militares activos, la Guardia Costera y los civiles y contratistas que les sirven directamente de apoyo en los departamentos de Defensa y Seguridad Nacional durante el periodo que dure el cierre temporal del gobierno.
Información y foto: Milenio